6/9/09

¿Echamos un rondo?


En la lección de hoy, espadachines de toledana cavernosa, vamos a alejarnos del noble (y en ocasiones sucio) arte del cortejo para rendir un pequeño homenaje a la amistad. Porque no hay sentimiento más puro ni gesto más bello muestra de ella que compartir las cosas buenas de la vida. Por supuesto, en lo alto del pódium de las delicias de este mundo están las mujeres, y nosotros, como buenos amigos, en muchas ocasiones, las compartimos, más o menos voluntariamente. Aunque generalmente más menos que más, Santo Tomás.

Y es que hay veces en las que, como en un rondo, el balón circula de uno a otro jugador, casi sin detenerse, al toque y con una armonía y gracilidad de hada de cuentos. Y a fe que no sólo se dan estos casos con chicas promiscuas de las difíciles de enlazar, sino que también sucede con las otras, las de relaciones largas, las de presentar a los padres, llevar a bodas e insinuarte repetidamente lo que les placería compartir techumbre. La única diferencia está en el tiempo, porque tanto unas como otras acaban cepillándose el rosco de Pasapalabra con pocos o ningún fallo.




Pobres los que sufran de celos
pues en un rondo se da al toque.
Que hasta el primo mete el estoque
y el celoso se tira de los pelos


Si tienes el balón en tus pies, hazte a la idea de que el balón volverá a circular. ¿Ves a tu compañero de enfrente? Pues quizá sea el próximo, quién sabe.

Y si no, tranquilo y ojo al juego, que aunque todavía no hayas tocado bola (o bolas, más bien) te llegará el esférico. Manido, pero te llegará.


Anejo:
Que bien es sabido que pasáis a diario decenas de lectores por esta casa del amor, echad un comentario u opinión, que serán bien recibidos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Genial, de las mejores entradas que has publicado.

Pero se olvida usted de mencionar a alguien que nunca participa en el rondo, el portero. Y es que siempre, en todos los grupos, hay una persona que ve como sus compañeros de equipo se pasan la pelota unos a otros y se divierten y él solo puede esperar a verla venir sin participar de la diversión y soñando con que un día podrá tocar a la pelota....aunque sea para recogerla de dentro de sus mallas

Anónimo dijo...

bueno, bueno...
Al menos el portero puede usar las manos, no?

elcoca dijo...

eres grande.

Elciervo dijo...

Le he dado al botón "ESCUCHAR" y realmente me he sentido como si estuviera en el banquillo escuchando las sabias palabras del mister (un poco gangoso, pero sabio al fin y al cabo)

J. dijo...

"Que hasta el primo mete el estoque"

Hijodeperrilla....

XDDDDDDDD

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