1/7/09

Un poco sobre lenguaje corporal

Suele ser frecuente en muchos Juniors o Launchers en prácticas que o bien pierden una ocasión de marcar un tanto por no percatarse de la receptividad de la dama, o bien acaban dándose contra el poste por pensar que había algo donde en realidad sólo había amabilidad, cortesía o simpatía.

Hay dos motivos principales por los que se dan estos fatal errors:

- Nuestro empecinamiento y falta de sangre fría en la cabeza (cualquiera de ellas) ha nublado nuestra capacidad de discernir entre simpatía o verdadero interés.

- No hemos sabido entender los mensajes no hablados que nos lanza la doncella en cuestión.

En nuestra lección de hoy tocaremos levemente, sólo como aproximación, el segundo punto enumerado: el lenguaje gestual o corporal.

El humilde Entrenador que os habla, suele decir a sus pupilos que los primeros minutos de una cita o encuentro bastan en muchas ocasiones para saber si la plazafuerte podrá ser o no conquistada.

Para comenzar debemos tener en consideración que nuestros brazos, manos, rostro y piernas son una prolongación de nuestra comunicación hablada. Que sea prolongación no quiere decir que tenga menos relevancia. De hecho, es infinitamente más difícil controlar conscientemente este tipo de comunicación que la oral. Es por esto que podemos sacar valiosísima información de este tipo de comunicación no verbal.

Fijémonos en las piernas (cachas que diría el gran López Vázquez). ¿Y por qué no en la cara o en las manos?- diréis- Son mucho más expresivas... Porque nos gustan los retos, ir por el estrato más profundo del amor, donde no llega la visión del resto de los mortales, porque no nos conformamos con ir a la UEFA.

Volvamos a las piernas (cachas que diría el gran López Vazquez). La posición y dirección de las mismas cuando estamos relajados tomando una copa en una cita con la chica puede darnos una escala de su interés hacia nosotros. Habría que tener en cuenta otros muchos factores, pero con éste se pueden sacar conclusiones con una alta probabilidad de acierto.

Así, consideremos dos vectores que parten de la cadera y terminan en las rodillas.

Si ambos vectores apuntan hacia una dirección que no es la nuestra (cruzadas las piernas o no) podemos dar casi por seguro de que la chica no está cómoda en la situación, se aburre o no tiene demasiado interés por tener una relación con nosotros.

Si uno de ellos nos apunta y el otro no, puede significar timidez o algún tipo de reserva. Este caso requeriría de más datos para sacar alguna conclusión, pero suele darse en chicas que tienen cierto interés en nosotros, pero hay algo que les frena, sea desconfianza, timidez o que tengan algún tipo de relación y no sepan si dejarse llevar o no, y qué consecuencias podría tener eso.

Si ambos nos apuntan, podemos dar casi por seguro que les agrada nuestra compañía, y sumado a otros tantos factores, puede que le gustemos y que vayamos en buen camino.

Fijaos que hablamos de "interés", porque sólo con esta información no podemos sacar nada en seguro, pero sí puede ayudarnos a tener una idea de su postura hacia nosotros, si le agradamos o no o si les está pareciendo placentera la cita.

Bueno, esto es todo en la primera lección sobre lenguaje corporal. Poco a poco iremos ampliando nuestro diccionario para que podamos ir un paso por delante y mantengamos la situación controlada.

¡Saludos!

5 comentarios:

Dani bISHOP dijo...

Por no hablar de la situación en la que cada rodilla apunta hacia su lado correspondiente, es decir, sin cruzar las piernas. Si necesitais leer un manual para entender esas señales, teneis un problema.

J. dijo...

Y qué hay de la moraleja en verso??

Ya hay varias entradas en las que prescinde usted de ella, Entrenador!!

Dani bISHOP dijo...

"Si de rodillas anda bizca,
no te comerás ni una pizca."

Luis Serrano dijo...

Pero qué blog más bueno! Jajajaja! Me encanta! Ya tenéis un fan más! :D

Entrenador dijo...

@Luis Serrano
Muchas gracias, nos alegramos de tener un nuevo Loverpooler en nuestras filas. ;)

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