1/6/09

Para tí que eres tímido: desinhibición etílica

Se da el caso en algunos Junior de banquillo (los que salen al campo del flirteo en escasas ocasiones) que requieren de la ayuda del líquido y tajante elemento para lanzarse al asedio de la portería contraria. Sin él no tienen la valentía necesaria para afrontar uno de nuestros intensos, largos y, generalmente, poco productivos partidos. El problema está en que si bien antes de beber no son capaces de hablar elegantemente con una dama por la timidez, después no lo son por la papa que llevan encima, soltando lindeces no aptas para nuestros refinados lectores, por lo cual las omitiremos.

En primera persona, cuando bebemos y nos acercamos a una chica, nos sentimos David Hasselhoff en los 80, pero visto desde segunda o tercera, somos más bien parecidos a David Hasselhoff en la actualidad. Si queréis tener una prueba directa del poco glamour que llegáis a tener en estado ebrio, no tenéis más que llegar a mitad de la noche con vuestros amigos en un día cualquiera de farra. Triste, ¿verdad? ¿A que no los tocaríais ni con un palo?

Entre varios hombres, uno, a la botella pegado.
Adivina, lince, quién esta noche no ha mojado

Y es que, pequeños Juniors, en la moderación está la clave y sobre todo, más vale hacer el esfuerzo de derrotar a la timidez y mantener control de tus sentidos y, sobre todo, de tus dotes lingüísticas, que vencerla fácilmente con las copas y luego ponerte a tí mismo en situaciones embarazosas y ridículas, esas que tanto gustan a tus amigos.

2 comentarios:

Burgomaestre dijo...

¡Cuánta sabiduría! Si no se siguen estos consejos puedes acabar acercándote a la "chica Unesco" de la noche para decirle:

"Todo está compuesto por átomos, esa pared, este vaso, incluso nosotros. Pero tus átomos están mejor ordenados que el resto"

Notedoy Minombre dijo...

Yo he dicho eso de los átomos...bueno, lo intenté, me perdí por el camino!

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