Seguro que más de uno de ustedes conoce a alguien cercano que, tras conocer a una chica o empezar una relación con ella, dedica gran parte de su tiempo y esfuerzo (en casos extremos todo) a tejer la trama de esta historia amorosa, dejando de lado, parcial o totalmente, otras actividades que solía realizar.
Ya no sólo comete el fatal error de no practicar multitargeting, convirtiéndose así en el peor tipo de broker, el que juega su inversión a un sólo valor, sino que este cambio radical (o patada brusca) en su escala de prioridades le puede llevar incluso a su propio suicidio social.
El Bet&Looser no sabe compaginar su vida social con su relación de pareja, dejando que ésta impere y eclipse al resto de cosas y abandonando sus hobbies, costumbres y amistades. El Bet&Looser olvida que la socialización es un pilar básico de nuestra felicidad y que quizá en los primeros tiempos de florecillas y mariposas una relación puede hacerte sentir pleno, sin necesidad de nada ni nadie más, pero más tarde, inevitablemente en gente que se aísla en su burbuja pastel, se acaba necesitando del mundo exterior para ser feliz.
Porque, si siempre estamos con la misma persona, ¿de qué hablamos? ¿Qué le contamos?
Si es sabido que Willy Fog
era y es el mejor apostador,
es porque se zumbó a Romi
y mantuvo a Tico y a Rigodón.
Y es que, caracoleros del área contraria, debéis grabaros a fuego en la cabeza que a la vida social hay que dedicarle esfuerzo, empeño y voluntad como si de un trabajo se tratara. Los amigos no están para siempre, no si no les has dedicado el tiempo suficiente, y el peor castigo que puede recibir un Bet&Looser no es siquiera que sus amigos, tras meses de desaparición, le den la espalda, si no que ellos mismos se den cuenta que ya no encajan, que no tienen confianza con ellos ni temas de conversación, que ni siquiera sepan que fulanito rompió con su novia, o que menganito se ha ido a trabajar a otra ciudad. Que se den cuenta, siempre tarde, normalmente cuando han roto su idílica relación, que apostaron todo a un número que ni siquiera estaba en la ruleta, que han perdido todo y han dejado de vivir muchas experiencias personales que hubieran sido únicas e inolvidables.
Juniors, hay tiempo para todo, aprovechadlo y vivid.
